Estadio Alejandro Borges, la leyenda urbana de Maracaibo que arriba a 76 años de historia
La importancia de la obra le llevó a ser declarada Patrimonio Deportivo y Cultural del Zulia en 1991 por parte del ayuntamiento maracaibero de entonces, reconocimiento que ostenta en la actualidad.
El estadio Alejandro Borges cumplió este 8 de diciembre 76 años de su fundación reafirmándose como uno de los íconos deportivos más emblemáticos de Maracaibo, pues en su terreno vieron luz innumerables páginas gloriosas del deporte zuliano, que trascendieron a la inmortalidad tanto por la magnitud de la proeza como por la grandeza de sus protagonistas.
El parque, que nació como estadio Olímpico, es hoy objeto de estudios para su recuperación y el resguardo del enorme valor patrimonial que encierra entre sus paredes.
La instalación deportiva ha pasado por diferentes etapas destacando en cada una momentos de grandes acontecimientos convertidos en líneas de historia, que están en proyecto de salir a la luz pública para que las nuevas generaciones las conozcan.
“Hicimos una supervisión general al estadio y tuvimos contacto con los trabajadores para conocer sus necesidades y aportes pues está en planes recuperar la infraestructura, reorganizar sus dependencias y revivir las diferentes escuelas de béisbol que hacen vida aquí”, dijo recientemente Heidi Molero, presidente saliente del Instituto Municipal del Deporte y la Recreación que tiene su sede en este parque.
La importancia de la obra le llevó a ser declarada Patrimonio Deportivo y Cultural del Zulia en 1991 por parte del ayuntamiento maracaibero de entonces, reconocimiento que ostenta en la actualidad y que se proyecta reflejar a la comunidad en general.
Entre los acontecimientos deportivos más importantes ocurridos en su terreno destacan la propia inauguración celebrada el 8 de diciembre de 1945 cuando la fanaticada de los equipos Gavilanes y Pastora asistió por primera vez al estadio Olímpico a presenciar la serie entre los grandes rivales de la época.
“Inmediatamente tras esa serie, el 25 de diciembre, las Estrellas Negras del béisbol de las Grandes Ligas visitaron Maracaibo y escenificaron su primer juego en el estadio Olímpico, de los cinco partidos que celebraron frente a equipos venezolanos, hecho que quedó registrado entre sus muros como una de las estampas de obligatoria cita para dar a conocer a las nuevas generaciones”, describe el recopilador Luis Verde en su libro Historia del Béisbol en el Zulia.

Igual nivel de importancia merece recordar el debut de Luis Aparicio en el béisbol profesional. “Luis Júnior, con tan solo 17 años, inició en el profesional con el equipo Gavilanes en su ciudad natal en el campeonato Rotativo. Su padre le entregó el guante y bate en un acto simbólico el 18 de noviembre de 1953 en el estadio Olímpico, hoy llamado Alejandro Borges”, recoge el portal Con Las Bases Llenas.
Su historia
Como expresión de la pasión de los maracaiberos por el juego de pelota y por el estadio Olímpico tras su inauguración surge la idea de crear la Galería de la Fama del béisbol zuliano, para inmortalizar a las grandes figuras de la época.
“El 19 de abril de 1949 la idea da sus frutos cuando se inaugura la obra en la parte del center fealder, al lado de la pizarra del parque para rendir tributo a las glorias de ese entonces. Los primeros exaltados fueron Luis Aparicio Montiel y Jesús ‘Manduco’ Portillo”, relata Enrry Rosales, presidente de la Asociación Zuliana de Béisbol del estado Zulia, uno de los más constantes impulsores del rescate del viejo estadio maracaibero.
El parque Alejandro Borges no solamente fue escenario de béisbol. La categoría de olímpico, con la que fue bautizado, le permitía albergar, como de hecho sucedió, otras competencias, entre ellas, boxeo y fútbol.
Por ello el boxeo profesional fue otro de los espectáculos que marcaron historia en la vieja estructura. “Entre los acontecimientos más memorables que guardo de esa época recuerdo del debut de Betulio González al profesional. Fue el 24 de abril de 1968 y lo hizo ante Elio Monzant, a quien noqueó en el tercer asalto de la contienda, entrando por la puerta grande al boxeo rentado donde alcanzó la gloria al darle a Venezuela tres títulos mundiales”, rememora Ángel Atilio Leal, periodista y narrador deportivo que presenció el debut del tricampeón mundial.
El campo del vetusto estadio municipal fue además escenario de importantes fojas trascendentales como las protagonizadas, entre otros, por el también zuliano Ramón Árias, el caraqueño Carlos “Morocho” Hernández, los hermanos José y Remigio Sulbarán, entre otras.
Leal explica que el ring de boxeo se armaba en el espacio ubicado entre el home y la lomita del lanzador. “En esa época el boxeo profesional en la ciudad había tomado tal auge que no habían escenarios acondicionados para montar esos espectáculos y el estadio Olímpico acogió con beneplácito esa función”, recuerda.
Luego vendría la fundación de la Arena Municipal, espacio ubicado por el lado de la primera base, dónde se practicaba boxeo aficionado.

Pero el tiempo ha dejado huella y el paso de los años ocupa su espacio en la vieja estructura, que reclama las refacciones naturales derivadas del desgaste por antigüedad en su construcción, labor que comanda el Imdeprec, actualmente en etapa de estudios.
Enrry Rosales, quien por años ha comandado las acciones para mantener activo el pulso de este baúl de historia deportiva regional, no pierde oportunidad de aupar los emprendimientos que en torno a su rescate se forjen desde cualquier vertiente.
“Además del rescate de la estructura que bien merece este patrimonio de la ciudad, es necesario recuperar la historia que encierra pues las generaciones de hoy en día la desconocen y en Maracaibo no hay otra instalación deportiva como esa que ofrezca tanto contenido en esta materia”, dijo Rosales sobre el estado del vetusto parque.
“Entre otras cosas que debemos rescatar hay que hacer énfasis también en la pizarra, la galería de la fama para tratar de llevarlo a lo más parecido que fue en sus orígenes, a su autenticidad. Es un verdadero compromiso de todos darlo a conocerlo pues allí está la historia del deporte en el Zulia”, acotó.
Cumplir tres cuartos de siglos es, sin duda, una gran oportunidad para que las viejas y nuevas generaciones coincidan de alguna manera en el objetivo de estimular su rescate por el bien de la memoria deportiva de Maracaibo, el Zulia y Venezuela.
Luis Bravo
Fotos: Luis Bravo