Brasil frena a Venezuela en la Copa América Femenina con un contundente 4-0
La escuadra amazónica resolvió el partido en 22 minutos del segundo tiempo.
El fútbol venezolano crece. De eso ya no hay dudas. La Vinotinto se anima a colgarse el cartel de favorita. Ocurre, sin embargo, que el techo de la selección todavía le queda lejos. Y hay pocos equipos mejores para demarcar ese límite que Brasil. Un rival mucho más arduo que Uruguay o Perú. Brasil impuso su fútbol (4-0) y su currículo, demasiado para el equipo de Pamela Conti, publicó Meridiano.
Insistió, en cualquier caso, Venezuela. De nuevo, siempre con Deyna Castellanos como faro, aunque esta vez sus remates se limitaron al balcón del área y a faltas. Además, contra Brasil, Pamela decidió dar descanso a Lourdes Moreno para dar entrada a Sonia O’Neill. Menos toque, pero más músculo para contrarrestar el poderío de las brasileñas. La estrategia no inquietó a Brasil.
Que rompió la línea defensiva de compuesta por Peraza, Verónica Herrera y Michelle Romero. La banda derecha fue la mejor amiga de Brasil que atacó y atacó hasta que el gol llegó.
La jugada inició en la banda contraria y un centro entre las dos centrales terminó en las redes un 1-0 que no afectó la moral del equipo, pero que no pudo reaccionar. El primer tiempo acabó con ningún disparo de la Vinotinto bajo los tres palos.
Segundo tiempo de goles
En el segundo tiempo, Conti movió el equipo ya pensando en Argentina. Sacó a Ysaura Viso y Oriana Altuve. Entró Mariana Speckmaier, pero Brasil apretó el acelerador y en 22 minutos setenció el partido.
El 2-0 llegó con una contra mortal que finalizó Ary Borges y luego un doblete de Debinha sentenció a la Vinotinto femenina.
Brasil jugó ese otro fútbol, dinámico y veloz. El choque desde el pitido inicial hasta el final fue un monólogo de Brasil. Venezuela sigue teniendo una cuenta pendiente con la Canarinha (nunca le ha ganado), pero debe sacar una lección de esta derrota y dejarlo todo contra Argentina en la última jornada.
Fuente: Meridiano
Foto: Cortesía / Agencias