El Irdez cumple 27 años de creado y casi una década deambulando sin sede propia
Actualmente no hay planes de buscar un espacio apropiado para estas oficinas que funcionan inadecuadamente en la villa deportiva
El Instituto Regional de Deportes del estado Zulia (Irdez) cumple 27 años de su creación, este 20 de septiembre, sin mucho que celebrar.
El deporte zuliano en general atraviesa una de las peores crisis en su historia sumergido en un letargo heredado de tiempos pasados, sin muchas mejoras en el presente, que tuvo en la destrucción de su núcleo, la Casa del Deporte en la avenida Padilla en 2014, un ataque casi mortal del cual está lejos de recuperarse totalmente casi una década después.
El sueño acrisolado en la creación del instituto, el 20 de septiembre de 1996 bajo Decreto N° 182 de la Gobernación del estado Zulia, significó para el deporte zuliano lograr una meta buscada por muchos años, que llegó con el proceso de descentralización.

Las políticas deportivas se adaptaron con la realidad local y el deporte se encaminó, con aciertos y desaciertos, por nuevos rumbos buscando siempre la excelencia. Después se creó la secretaría de deportes que se encargaba de gestionar esas políticas y el instituto de ejecutarlas.
Pero la realidad del país cambió conllevando modificaciones en todos los ámbitos y el deporte regional no escapó a una de sus principales consecuencias: La crisis económica actual que no necesita más explicaciones.

El vandalismo disfrazado de lucha social se ensañó contra muchas instituciones y el deporte, que por siempre se mantuvo lejos de la arena política, de repente se vio inmerso en una voraz arremetida que cercenó su órgano vital, la sede del Irdez.
«Primero lo saquearon. Se llevaron material deportivo, televisores, mobiliario y las computadoras donde teníamos toda la data, la memoria del instituto, los registros de los atletas, las becas y la nómina. Todo eso se perdió», explicó Leonet Cabeza quien para ese 23 de marzo de 2014, día en que ocurrió el primero de muchos ataques, era el director del instituto bajo el mandato del gobernador Francisco Javier Árias Cárdenas.

Lo que quedó en pie lo destruyeron y por último incendiaron el edificio como para que no quedara ni un vestigio de aquello que fue orgullo del deporte zuliano, motor y soporte vital de esta actividad en el estado.
Las pérdidas son irrecuperables y los daños irreparables. La estructura quedó para ser demolida o ir directo al colapso cuando las bases cedan debilitadas por la candela de días y semanas.
Entrar allí a plena luz del día causa miedo. Es guarida de gente de mal vivir, depósito de basura y los olores nauseabundos saturan el ambiente. La oscuridad reinante cruzada por algunos rayos de luz, que entran por los agujeros e iluminan fragmentos de paredes chamuscadas, semeja un escenario de terror. Por las noches debe ser mucho peor.
La fachada fue pintada para tratar de ocultar el triste escenario que hay detras de las paredes cubiertas de hermosos colores.
Sin solución a la vista
Luego de este desastre la actividad deportiva bajó a su mínima expresión en el estado. Mientras otros factores alimentaban la zozobra, el Irdez quedó reducido a una oficina, sin computadora y apenas un par de sillas, en un espacio bajo la tribuna principal del «Pachencho» Romero, que para ese entones era presa del vandalismo que azotaba a todo el polideportivo.
Comenzaba una nueva lucha que hoy está lejos de concluir.
«No hay planes para una nueva sede. Mientras tanto estamos trabajando en la villa deportiva donde el gobernador Manuel Rosales ordenó un espacio para el Irdez y la secretaría de deportes», explicó Alexander Delgado, secretario de deportes y director del Irdez.

«Seguimos trabajando con todas las ganas a pesar del espacio limitado y esperamos que en un futuro podamos tener nuestras propias oficinas. Hasta ahora la villa deportiva va a ser nuestra sede», dijo el funcionario.
Comenzando la nueva gestión con Manuel Rosales en la Gobernación del Zulia a finales de 2021, el panorama era desolador para el deporte zuliano. Al Irdez le quitaron el espacio que ocupaba en el «Pachencho», instalación administrada por el Ministerio de Juventud y Deporte, y fueron obligados a migrar a la villa deportiva.
Nacía otra sede temporal para la administración del deporte, que todavía sigue igual. La secretaría despachaba desde la sombra de un árbol al lado de la villa deportiva y el Irdez en una pequeña oficina con espacio apenas para un escritorio y un par de sillas. Aunque las cosas han mejorado, no hay mucha diferencia con aquellos duros días del comienzo.
El departamento de prensa, cerebro comunicacional de toda institución pública y vehículo para proyectarla ante la sociedad, funciona en las sillas del lobby y del comedor, sin equipo, solo con los teléfonos celulares propiedad de los mismos periodistas, que cumplen estas funciones más con el corazón que con recursos.
Varios gobiernos regionales están en deuda con el deporte zuliano. Le deben una sede y luego de casi 10 años sería justicia, por lo menos, hacer el proyecto de cómo pagarle.
Es un caso difícil de resolver dada la actual coyuntura económica de la región y el país, pero es hora de que las autoridades retomen el tema y por lo menos anunciar la voluntad de querer hacerlo.
Luis Bravo
Fotos: Luis Bravo
Muchas gracias por su comentario
Por favor quien suscribe es jorge torres..quiero saber quien es el encargado de deportes delirdez